jueves, 27 de diciembre de 2007

Gajes del oficio



Hace escasamente dos años, y unos pocos días, en diciembre de 2005, viajé a España para participar en dos eventos: la presentación de un libro donde se incluía una de mis piezas de teatro y las deliberaciones de los premios de dramaturgia de Villa de Torreperogil, en su edición de ese año, de las que formaba parte del jurado.

Era la primera vez que salía del país en mi recién adquirido rol de escritor. Antes lo había hecho en innumerables ocasiones como ingeniero en informática, oficio que abandoné en 2003, como han de saber algunos de mis lectores, para dedicarme por completo a la literatura.

Entretanto rellenaba las formas de inmigración para mi entrada en España, al llegar a la casilla “Profesión”, tuve la duda de si colocaba “escritor” o “ingeniero en informática”. Quizá la costumbre, o un prurito para entonces inconfesable, me obligaron a escribir: “ingeniero en informática”.

Días después, de retorno a Caracas, ante esos chocantes formatos de inmigración, me ganó de nuevo la duda, ¿qué colocaba en la casilla de “Profesión”? Reflexioné un poco y tal vez gracias al buen trato recibido en Torreperogil, y a una extraña confianza adquirida durante el viaje, me atreví a colocar: “escritor”.

Mientras en el aeropuerto de Baraja el agente de inmigración pasó por alto lo que decía la casilla “Profesión” de mi formato, en Maiquetía no pasó desapercibida y el agente me hizo no pocas preguntas y comentarios relacionados con mi oficio de escritor.

Y es que esta profesión pareciera levantar sospechas en el ánimo de algunos de nuestros interlocutores. “¿Escritor? ¡Escritor es Gabriel García Márquez!”, parecieran pensar al tiempo que nos miran por el rabillo del ojo con una expresión a medio camino entre una profunda compasión y una inadmisible pena ajena.

Ahora que lo escribo —no sé si la experiencia vivida en los últimos cinco años ha aumentado mis niveles de paranoia—, siento que es la misma expresión que acostumbro a ver dibujada en los rostros de ciertos parientes, amigos o conocidos cuando respondo a su pregunta sobre qué estoy haciendo ahora.

Sin duda hay profesiones dentro de las cuales uno pareciera estar más obligado que en otras a tener éxito. O al menos a obtener esas prebendas que la gente común suele relacionar con el éxito: reconocimiento, premios, fama o notoriedad, y, desde luego, no podía faltar, dinero. El oficio de escribir pareciera ser una de ellas. ¿Les suena el “cuando seas famoso...”? Y es raro, o al menos paradójico, que se manifieste algo parecido en el inconsciente colectivo de un país donde la lectura no está entre las principales necesidades, actividades o pasatiempos de sus habitantes. En lo que a mí respecta, esto sí que debería ser digno de levantar irreductibles sospechas.

Tomar la decisión de ser escritor en nuestros países tal vez se aproxime demasiado a dar un salto al vacío. “Un acto de locura”, como dijo Vargas Llosa. Pero no hacerlo, deseándolo por encima de todo, sería en cambio un acto de cobardía. A mí me llevó casi veinte años entenderlo. Sin embargo, fue suficiente tiempo para interiorizar la lección y aprenderla.

Irónicamente, ahora que la he tomado como oficio, la literatura se me ha convertido en una gran incertidumbre. Cada vez que reflexiono sobre ella, sobre sus efectos, son enormes nubarrones los que se asoman en el horizonte. Nada luce despejado. A lo largo de los años que me desempeñé como ingeniero en informática, lo confieso, nunca me había sentido tan desguarnecido, tan frágil, como me he sentido en los últimos cinco años. Sin embargo, quizás sea precisamente esto, lo que cada día hace a la literatura más atractiva para mí, aumentando mis deseos de profundizar en ella. A pesar de los obstáculos encontrados, no veo manera de desandar el camino que decidí emprender a partir de 2003. Empecé a escribir historias a los once años, y, alcanzados los cuarenta, el gusto por hacerlo parece haberse reinventado, hallado nuevas vertientes.

Como dice la popular cuña de la tarjeta de crédito: “hay ciertas cosas que el dinero no puede comprar...”, entre ellas está la satisfacción de dedicarse a lo que uno desea. Y cuando la vida nos presenta esa oportunidad, importa poco lo que piensen o digan los demás.

Borges escribió que la vida exigía una pasión, la mía es escribir.

De ahora en adelante, en los formatos de inmigración que deba rellenar en los países que visite, en la casilla “Profesión”, no dudaré en colocar la palabra “escritor”.

Esa y no otra.

miércoles, 19 de diciembre de 2007

A hacer teatro en el oeste


El Teatro San Martín de Caracas (TSMC) acaba de circular una convocatoria donde invita a los grupos de teatro y danza de la ciudad a presentar sus propuestas con el fin de ser seleccionadas e incluidas dentro de la programación de su nueva sala para la temporada 2008.

Se trata de la renovada “TextoTeatro”, sala anexa que acaba de ser refaccionada y equipada para su inmediata puesta en marcha.

“La Fundación Teatro San Martín, con el apoyo del Ministerio de Cultura-IAEM y de la Fundación Amigos del TSMC, ha invertido en la reparación de la sala, nuevas construcciones y adquisición de nuevos equipos, para ponerla a disposición de los grupos de teatro y danza”, dice la convocatoria.

La sala cuenta con 115 butacas, consola de 24–38 canales, banco de dimmers con capacidad para 24 reflectores, reflectores Fresnels, Lecko y Par, Equipo de sonido, planta, cd player, nueva platea y nueva cabina técnica.

Los grupos interesados pueden escribir, desde ya, presentando sus propuestas, al siguiente correo electrónico, con el asunto, “SALA TEXTOTEATRO 2008”: tsmc@tsmcaracas.com

A partir del 25 de enero de 2008, la sala TextoTeatro del TSMC estará disponible para realizar temporada en Caracas tanto de obras de teatro de cámara como de danza. Será programada para funciones de jueves a sábado, a las 8 PM, y los domingos a las 6 PM.

REQUISITOS DE LA SOLICITUD:
1.- Un email con: Nombre del Proyecto, autor, director, grupo. Breve reseña del grupo y del espectáculo.
2.- Fechas convenientes para la agrupación. Colocar dos meses, ejemplo: MARZO-ABRIL o AGOSTO-SEPTIEMBRE.

CRITERIO PARA LA SELECCIÓN:

1.- La SALA TEXTOTEATRO será programada durante el año 2008 con las propuestas recibidas a partir del 17 de DICIEMBRE del 2007 en nuestra dirección e-mail.
2.- Las solicitudes serán consideradas por orden de llegada.
3.- Sólo se programará espectáculos para público ADULTO. (Las obras de teatro infantil pueden postularse para la temporada en la SALA PRINCIPAL DEL TSMC por la misma vía, dirección e-mail.)
4.- LA SALA TEXTOTEATRO ES UN ESPACIO DE CÁMARA, ES DECIR, PARA OBRAS O ESPECTÁCULOS QUE PUEDAN ADAPTARSE A UN ESPACIO PEQUEÑO (5 mts de ancho, disminuyendo en forma de abanico, x 4 mts de profundidad y 5 mts de alto). ASÍ, SE LE DARÁ PRIORIDAD A LOS ESPECTÁCULOS QUE TENGAN UNA PROPUESTA ACORDE CON LA CAPACIDAD DEL ESCENARIO.

CONDICIONES GENERALES:

1.- La Sala se asignará para una temporada mínima de cinco fines de semana seguidos, pudiendo alargarse la misma, de darse las condiciones tanto de público como de programación.
2.- Las condiciones de reparto de taquilla será, durante el 2008: 70% para el grupo, 30% para el TSMC, luego del pago del 10% correspondiente al autor.El resto de las condiciones que se aplican para la Sala Principal y el funcionamiento interno del TSMC.

lunes, 17 de diciembre de 2007

Coincidencias

El cemento más seguro para una convivencia democrática es la existencia de una densa cultura política instalada en la piel de la gente, es decir, una cultura democrática que funciona ella misma como límite del conflicto.

En Venezuela estamos lejos de ese ideal. Pero podemos caminar en esa dirección echando abajo los poderosos obstáculos de la miseria y la exclusión cuya persistencia hace inviable cualquier idea de país.

Rigoberto Lanz

lunes, 10 de diciembre de 2007

Así se construyen las ironías


Stalin fue candidato al premio nobel de la paz hace 60 años

Los ganadores se anuncian cada año, pero tiene que transcurrir medio siglo para que las candidaturas a los Nobel se hagan públicas, una regla que desvela con el tiempo que Stalin fue candidato al Premio de la Paz, mientras que Gandhi nunca logró el galardón en las cinco ocasiones que fue postulado. Stalin fue nominado en dos ocasiones: en 1945, por "sus esfuerzos para terminar la Segunda Guerra Mundial" y en 1948, a pesar de que su régimen hizo que murieran millones de personas. Ese año su candidatura estuvo al lado del paladín de la revolución pacífica contra la colonización británica en la India, Gandhi.


Fuente: Diario El universal de Caracas

sábado, 8 de diciembre de 2007

Premio de cuento para jóvenes autores

La Policlínica Metropolitana convoca al PREMIO DE CUENTO "POLICLÍNICA METROPOLITANA" PARA JÓVENES AUTORES, en su segunda edición (2008).

La Policlínica Metropolitana ha instituido este premio para Jóvenes Autores como un reconocimiento a los jóvenes talentos venezolanos en el arte de la escritura. Con este premio se pretende promocionar y estimular la alta creación juvenil y enriquecer el patrimonio cultural escrito.

Los autores que concursen deberán regirse por las siguientes

B A S E S

1.- Podrán participar todos los autores venezolanos, o extranjeros residenciados en el país, menores de 40 años.

2.- Se admitirá un sólo cuento por autor, de tema libre, los cuales deberán ser originales, inéditos y escritos en lengua española, con extensión comprendida entre las cinco (5) y las treinta (30) cuartillas, a doble espacio e impresas por una sola cara. Los textos participantes deberán ser inéditos, no premiados anteriormente ni comprometidos en otro concurso o publicación.

3.- Se otorgará un 1er. premio de Bs. 5.000.000, un 2do. premio de Bs. 2.000.000 y un 3er. premio de Bs. 1.000.000. El jurado podrá otorgar, además, las menciones que considere necesarias.

4.- Los cuentos participantes serán recibidos hasta el 15 de febrero de 2008. El veredicto se dará a conocer el 15 de abril de ese año, fecha en que se precisará el día del acto de premiación. Un número limitado de cuentos podría resultar con menciones honoríficas, a consideración del jurado, con opción a ser publicados junto con el cuento ganador, sin que ello implique ninguna retribución monetaria para los autores. Policlínica Metropolitana se reserva el derecho de publicación y explotación de las obras premiadas, así como el de las menciones honoríficas, en cualquier forma y modalidad, dentro y fuera del territorio nacional, sin limitación alguna. En consecuencia, el ganador, los premiados y aquellos con posibles menciones honoríficas, cederán a Policlínica Metropolitana los derechos para editar, publicar y comercializar las obras, en un número limitado de ejemplares y por un plazo máximo de diez (10) años, contados a partir de la fecha del concurso, aunque se trate de una coedición.

5.- Los premios serán indivisibles y no podrán ser declarados desiertos.

6.- Los textos participantes se enviarán con seudónimo, en cuadruplicado, a la siguiente dirección: Junta Directiva, Sótano 2, Policlínica Metropolitana, Calle A-1, Urbanización Caurimare, Caracas, 1060. En sobre aparte se colocarán el nombre del cuento, el seudónimo y los datos completos del autor (nombre, dirección, CI, teléfono, correo y un breve CV). También podrán participar enviando al correo electrónico: concursodecuentos@pcm.com.ve y un archivo adjunto con el cuento en word, y otro con los datos del autor.

7.- El jurado del concurso estará integrado por los escritores Eduardo Liendo , Federico Vegas y Oscar Marcano.

8.- Todo lo no estipulado en estas bases será resuelto por el Comité Organizador.

9.- El ganador se compromete a participar personalmente en la ceremonia de entrega del premio, actos de presentación y promoción de su obra. El autor ganador y aquellos con menciones honoríficas autorizarán a los organizadores del premio utilizar su nombre e imagen con fines promocionales.

10.- No podrán participar aquellas personas que trabajen en la Policlínica Metropolitana, C. A., ni en sus empresas filiales.

lunes, 3 de diciembre de 2007

Teatro venezolano premiado en Japón


El Teatro San Martín de Caracas-TextoTeatro ganó el pasado lunes 26 de noviembre el PREMIO DEL PUBLICO en el 3er FESTIVAL INTERNACIONAL DE YAKUMO, Matzue, que finalizó en el Oeste de Japón. El grupo de Venezuela fue galardonado con el premio más importante del evento, otorgado por los espectadores a través de votación secreta.

Venezuela presentó en Yakumo el espectáculo WET DOG WAITING, versión internacional basado en la obra BANDOLERO Y MALASANGRE de Gustavo Ott, unipersonal estrenado en San Martín con el actor DAVID VILLEGAS.

Por su parte, los miembros del jurado, los norteamericanos Annet Procunier, James Sohre y el director de la Opera de Singapur, Chua Soo Pong, dieron el Premio a la Mejor Producción al grupo de Corea, Domo Theater Company por su montaje de Nightmare, un poderoso y conmovedor espectáculo dirigido por Hwang Woon Ki, quien también se llevó los premios al Mejor Director y al mejor actor de reparto, Kang Jun Hwan.

El Premio al Mejor Actor fue para Nawar Bulbul del grupo Al’Khareef Theater Company de Siria por su trabajo en A Feast Night Dream. El reconocimiento a la Mejor Actriz fue para Muriel Solatges del grupo Enfants Terrible de Francia por su trabajo en Les Plaisir d´la amour, obra que además obtuvo el Premio a la Mejor Actriz de reparto, Melanie Cervillon. El Prmio al dispositivo técnico fue a dar al grupo de los EE.UU, Altoona Theater , por su montaje de Alice.

Venezuela cerró así el Festival de Yakumo en el Alba Hall de la ciudad con esta obra definida por la critica de Matsue como “un extraordinario espectáculo que encantó a los espectadores por su fuerte contenido y la maestría actoral de Villegas, en lo que fue la noche más divertida, profunda y aplaudida de Matsue”.

Fuente: http://davidvillegas.blogspot.com/

Un cliché y dos esperanzas


Cliché: el pueblo venezolano tiene una profunda cultura democrática.

Esperanza uno: pareciera que las nuevas generaciones (léase jóvenes, léase estudiantes) tienen la mejor disposición de sacar de su categoría de cliché la frase anterior, puesto que también parecieran haber entendido, después de años de apatía, que la política, y los partidos políticos, en toda su diversidad y pluralismo, son fundamentales para la democracia.

Esperanza dos: pareciera que algunos políticos, y algunos partidos políticos, por supuesto, han comenzado a entender que lo importante es el equipo (Venezuela) y no un grupito de compinches (el partido), que la forma de defender la democracia está dentro de la misma democracia y no fuera de ella y que ese camino, pese a los propios deseos, casi siempre será largo, tortuoso, en fin, lleno de obstáculos.

A pesar de mi natural escepticismo, hoy, 3 de diciembre de 2007, después de un polarizado y reñido cotejo electoral, en el que nuestra democracia pareciera haber encontrado un respiro, como venezolano, necesito aferrarme, creer en estas dos esperanzas para algún día decir, como muchos ahora y en el pasado: “que el pueblo venezolano tiene una profunda cultura democrática” y que al mismo tiempo esa frase no me suene hueca, vacía, no me suene a simple cliché (por ejemplo, 44% de abstención en un momento crucial, en el que sin duda nos jugábamos nuestro futuro democrático, ¿son muestras de una “profunda cultura democrática”?)

Desde luego, sólo el tiempo lo dirá...